Microsoft ha anunciado que suspenderá Skype en mayo, reemplazándolo con una versión gratuita de los equipos de Microsoft. Esta decisión se produce en medio de un paisaje dominado por plataformas de comunicación VoIP como WhatsApp, Zoom, FaceTime y Messenger, señalando un cambio de llamadas tradicionales de teléfonos celulares facilitados por Skype.
Según el Verge, los usuarios existentes de Skype podrán hacer la transición sin problemas a los equipos de Microsoft, donde pueden acceder a su historial de mensajes y contactos sin necesidad de crear una nueva cuenta. Microsoft planea eliminar gradualmente el apoyo a las llamadas nacionales e internacionales a través de Skype.
Para aquellos que prefieren no migrar a los equipos, Microsoft ofrece una herramienta para exportar datos de Skype, incluidas fotos e historias de conversación. Los usuarios tienen hasta el 5 de mayo para tomar su decisión, ya que Skype se desconectará en esa fecha. Microsoft continuará honrando los créditos de Skype existentes, pero dejará de ofrecer nuevas suscripciones para las características pagas que permiten llamadas internacionales y nacionales.
La característica principal perdida con el cierre de Skype es la capacidad de hacer llamadas a los teléfonos celulares. El vicepresidente de producto de Microsoft, Amit Fulay, explicó al borde de que, si bien la funcionalidad de telefonía fue vital, su relevancia ha disminuido. "Parte de la razón es que observamos el uso y las tendencias, y esta funcionalidad fue excelente en el momento en que Voice Over IP (VoIP) no estaba disponible y los planes de datos móviles eran muy caros", señaló Fulay. "Si miramos el futuro, eso no es algo en lo que queremos estar".
Microsoft adquirió Skype por $ 8.5 mil millones en 2011, con el objetivo de mejorar sus ofertas de comunicación en tiempo real y aprovechar los entonces 160 millones de usuarios activos de Skype. Skype fue una vez una característica clave de los dispositivos de Windows y se promovió como una adición atractiva a las consolas Xbox. Sin embargo, Microsoft reconoce que la base de usuarios de Skype se ha estancado en los últimos años, lo que provocó un cambio de enfoque hacia los equipos de Microsoft para el uso del consumidor.